Las aves frugívoras desempeñan un papel importante en el ecosistema, pues son portadoras de frutos y semillas que transportan a través del vuelo. Esto, indirectamente, contribuye a mantener la diversidad biológica y la salud general de los bosques. Sin embargo, este beneficio también tiene algunos efectos negativos, especialmente el motivado por la presencia de estas aves en los cultivos de berries.
Los cultivos de berries son cada vez más frecuentes en todo el mundo. Los beneficios económicos que generan son obvios, pues los terrenos en los que se realizan estos cultivos ofrecen la producción de frutos comestibles de una forma masiva. Sin embargo, esto también tiene sus riesgos, ya que al encontrarse un cultivo de berries en un entorno de bosques, las mismas aves frugívoras pueden afectar considerablemente la producción.
Durante la temporada de cosecha suele haber una concentración de aves frugívoras juntas en el terreno. Estas aves suelen acudir a los terrenos de berry cultivados para comer los frutos. Esto es una de las principales preocupaciones del sector. Si bien la presencia de aves frugívoras en la zona puede facilitar la dispersión de un cierto número de semillas, como consecuencia de este comportamiento aumenta el riesgo de los frutos maduros ser consumidos antes de la cosecha, lo que conduce a una menor producción, la cercanía de las aves frugívoras al cultivo beneficia a los insectos que pueden alimentarse de las berrías y causar estragos en las mismas, como son las larvas, orugas, hormigas u hormigas, entre otros. Estos insectos son responsables de la destrucción de la fruta y generan una reducción de la producción.
Estas aves también son una amenaza para los árboles cercanos al cultivo. Esto se debe a que suelen encontrar alimento en los frutos que estén cerca del árbol. En consecuencia, las alas pueden golpear los árboles provocando daños en los troncos y las ramas, lo que se traduce en una disminución de la producción.
Por estos motivos, los agricultores deben estar preparados para reducir los riesgos que presentan estas aves. Una buena estrategia para controlar el riesgo que suponen las aves fructívoras es usar barreras físicas para evitar que ingresen al cultivo. Existen distintos materiales que pueden ser colocados alrededor de los terrenos, como vallas, enrejados y alambres para disuadir el ingreso de estas aves. Otra estrategia que puede realizarse es la colocación de estructuras artificiales cerca del terreno para abrigar a estas aves. Estas construcciones tienen como objetivo brindar lugares seguros para que las aves descansen y se alimenten sin poder dañar los frutos y semillas de los cultivos de berries.
Es importante dar a conocer a los propietarios de los terrenos los riesgos que presenta la presencia de estas aves. Esto permitirá que el propietario tome consciencia de los daños que ellas pueden ocasionar en los cultivos y tome las medidas de prevención que sean necesarias, para evitar la disminución en la producción de las berries.
Las aves frugívoras más destacadas
Las aves frugívoras son aquellas aves que se alimentan principalmente de frutas. Se clasifican como un grupo distinto dentro del orden de las aves, debido a la importante cantidad de frutas que consumen. Se trata de una de las mayores fuentes de alimento en el mundo para muchas especies de aves. Estas aves no solo ayudan a propagar la cadena alimenticia en los bosques, sino también acontrolar poblaciones de insectos, que pueden ser dañinos para plantas y animales.
Son las que han evolucionado para adaptarse a la variada dieta de frutas que estas consumen. Estas aves cuentan con patrones de color específicos para tratar de encontrar la fruta adecuada para alimentarse. Por ejemplo, algunas especies tienen bandas anaranjadas en sus plumas, esto es para identificar los frutos maduros en los árboles.
Entre las aves frugívoras más destacadas están el loro cacique, el arakara, el tucan, el loro hawhak, el loro cotorra, el caracara, el loro tucacara, el loro hornilla, el saíz piquigualdo, el sapito-verde, el cacique-cepillo y el cacique-pecho-blanco. Estas aves suelen medir entre 10 y 40 centímetros de longitud y variar en tamaño y color.
El loro cacique, aves de origen neotropical, destaca por su saco gular color naranja y negro. Su plumaje es predominantemente naranja, con algunas zonas amarillas y pueden llegar a medir hasta 25 centímetros de longitud. Esta ave alimenta su dieta principalmente de frutos como los aguacates y los frutos de palmera., Otra ave destacada de este tipo es el arakara, una ave de tamaño mediano y color amarillo intenso y rojizo en su parte superior. Vive en los bosques tropicales de América del sur y se alimenta de diversos tipos de frutas, semillas e insectos. Esta ave necesita caminar sobre la copa de los árboles para buscar frutos maduros.
El tucan también se destaca entre las aves frugívoras. Puede llegar a medir hasta unos 55 centímetros de longitud, con colores intensa que van desde el negro, amarillo hasta el naranja. Esta ave vive en América tropical y se alimenta de frutos, semillas y en ocasiones algunos insectos y huevos., Otro destacado es el loro hawak, una ave de color café con la característica cresta blanquecina en su cabeza. Esta ave se alimenta principalmente de frutos maduros, brotes tiernos y semillas. El loro hawak también se alimenta de plantas trepadoras para alcanzar frutos maduros.
El caracara, una ave de color café con la parte superior de su cuerpo de color amarillo, se destaca por su plumaje contrastante. Esta ave puede vivir en bosques secos y zonas agrícolas. Se alimenta principalmente de bichos y algunas frutas. El caracara también se alimenta de huevos y polluelos de otras aves.
Aves frugívoras destacan por su variedad de alimentos y hábitat. Estas aves tienen una importante función en la cadena alimenticia de los bosques al controlar poblaciones de insectos y propagar frutas. Entre estas aves, destacan el loro cacique, el arakara, el tucan, el loro hawhak, el loro cotorra, el caracara, el loro tucacara, el loro hornilla, el saíz piquigualdo, el sapito-verde, el cacique-cepillo y el cacique-pecho-blanco.
¿Cuál es la cantidad de alimento que necesita un ave frugívora?
Una ave frugívora es aquella que se alimenta principalmente de frutos, pero también consume insectos y otros alimentos. Estas aves son abundantes en bosques tropicales, bosques subtropicales y selvas. Son un grupo importante de la familia de las aves llamadas afines, cuyos miembros tienen una tendencia a comer frutos y semillas.
La cantidad de alimento necesario para una ave frugívora varía según el tamaño y la edad de la ave. Estas aves generalmente comen dos o tres veces por día y si están disponibles aves forrajeras excepcionales, pueden comer hasta seis veces al día. Un adulto deberá comer al menos una pequeña porción de alimento por día, pero con la llegada de sus crías, se requerirá una cantidad mayor. En general, un adulto requerirá entre 15 y 20 gramos de alimento al día, mientras que una cría recién nacida requerirá entre 25 y 35 gramos al día.
Es importante tener en cuenta que los frutos no representan la única alimentación para una ave frugívora. Estas aves también necesitan insectos para su dieta. Estos insectos fornecerán proteínas, vitaminas y minerales necesarios para su buen estado de salud. Estas proteínas se encuentran abundantemente en los insectos pequeños como hormigas, hormigas voladoras, arañas, escarabajos, moscas y mosquitos. Estos pueden ser recolectados directamente del suelo y los árboles.
En el caso de los bebés, deberán comer el extra de proteínas para mantener un buen desarrollo. El alimento para bebés debe contener principalmente frutos, pero también incluirá una gran cantidad de insectos ricos en proteínas, vitaminas y minerales.
Algunas aves frugívoras también comen algunas bayas pequeñas y algunos vegetales como hojas y gérmenes para obtener distintos nutrientes. Esto se debe a que estas aves no solo buscan los frutos que les brinden azúcares como fuente de energía, sino también las bayas y vegetales que contengan vitaminas, minerales y proteínas.
Para una ave frugívora, la dieta diaria debe ser variada y contener los nutrientes necesarios para su crecimiento sano. Esta dieta diaria consistirá principalmente de frutos, pero también incluirá algunos insectos ricos en proteínas, vitaminas y minerales. Los bebés necesitarán aún más insectos para satisfacer los requerimientos nutricionales necesarios para un correcto desarrollo.